"La aceptación"
La vida es tan impredecible. Ella nos enseña a través de situaciones difíciles, a luchar y a seguir adelante. Si te caes debes levantarte, sacudirte y seguir tu rumbo. En la vida muchas veces nos caemos porque siempre conseguiremos una piedra con la que vamos a tropezar, sea con intención o sin darnos cuenta.
En mi caso me ha tocado vivir muchas situaciones difíciles, como por ejemplo el tener un padre biológico con el que nunca me lleve bien y al que le permití dañarme muchas veces, lo que causo que creciera en mi un sentimiento de frustración, rabia y tristeza que con el tiempo termino enfermando mi cuerpo y mi alma. Otra situación difícil fue haber perdido temprano a mi padre de crianza al que adoraba porque era mi amigo, porque desde muy pequeña me crió como su hija biológica y porque me enseño a leer, con él aprendí matemáticas y a sonreirle a la vida a pesar de los problemas, este hombre maravilloso estuvo a mi lado por 15 años dándome mucho amor, pero luego enfermo y falleció dejándome un gran vacío porque sentí que nos faltaba mucho por vivir como padre e hija. Cuando mi padre murió, yo agarre las riendas de la casa con tan solo 17 años y salí a trabajar para ayudar a mi mami a llevar la comida a la mesa cada día. En el amor tampoco me fue bien que se diga y eso en cada momento rompió mi corazón.
Luego vino "la enfermedad" y me sentí hundida en un enorme abismo, pensé que moriría dejando a mis hijas pequeñitas, y el miedo y la depresión se apoderaron de mi vida, y sin darme cuenta me aleje de todos mis seres amados.
Que me enseño la vida al final después de tantos golpes? Me convirtió en una mujer fuerte, en una guerrera de este mundo. Soy una mujer llena de conocimiento, con el corazón agradecido por cada día que me toca vivir, me levanto cada mañana agradecida por respirar, por la familia que Dios me regalo, por los amigos que siempre han estado a mi lado, por mi hogar, por mi empleo, por el cambio que he tenido en mi cuerpo, espíritu y mente, por todo lo que me rodea. Me convertí en una persona bondadosa, llena de energía positiva, aprendí a sonreír ante cualquier dificultad. Aprendí a pensar en positivo, ya no veo al Lupus como enfermedad sino como una condición que me toco vivir. El perdón es parte importante en mi proceso de sanación y eso incluye entender cuando debo apartarme de las personas toxicas para mi. Hoy soy mejor persona porque agarre todo lo que me ha tocado vivir y lo transforme en algo positivo, en aprendizaje y en gratitud.
Siempre que algo malo nos sucede es para que cambiemos algo de nuestra vida, vamos a enfocarnos en lo positivo para poder ser felices. Recuerda que si pensamos en positivo atraeremos solo lo mejor a nuestro mundo!!
Se puede vivir con una condición de salud crónica, podemos sanar nuestro cuerpo y alma, podemos ser felices aceptando nuestra realidad con amor!!
"Alma Inmunologica".
Meuriam
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